La Federación Española de Rugby (FER) ha desvelado este viernes los cuatro puntos en los que se basa los argumentos en la reclamación ante Rugby Europe por el "presunto arbitraje intencionadamente parcial del rumano Vlad Iordaschescu en el encuentro Bélgica-España disputado el pasado 18 de marzo en Bruselas y que solicita que se repita.

En primer lugar la FER señala que hubo "vulneración del Artículo 2 del Código Ético del Comité Olímpico Internacional (COI) al no respetarse la imparcialidad, objetividad y independencia en el nombramiento de los tres árbitros del encuentro".

El segundo punto de su argumentación es "incumplimiento del Artículo 6 del Código Ético del COI al haber permitido en estos nombramientos de los árbitros rumanos que aflorara un conflicto de intereses ya que si Bélgica ganaba el encuentro se clasificaba Rumanía para el Campeonato del Mundo 2019".

Asimismo, señala "incumplimiento del artículo 6 del Convenio Europeo de Protección de los Derecho Humanos al no haber habido un juez independiente e imparcial en el encuentro. Dos de los tres árbitros tienen vinculación económica y/o salarial con la Federación Rumana de Rugby".

El cuarto punto hace referencia a la "vulneración de la Regulación 18.1.3 de World Rugby (WR), al poder constituir la actuación del árbitro un claro perjuicio a los intereses e imagen de World Rugby".

"Este comportamiento está recogido en una prueba documental de vídeo con 19 secuencias de decisiones tomadas por el árbitro que, o bien eran sanciones contra el equipo de España si haber habido infracciones a las reglas del juego o bien eran infracciones del equipo belga que no fueron sancionadas", concluye la FER.

Por todo ello, la FER "ha solicitado que un comité independiente de árbitros (no valdrían aquellos que han participado en el nombramiento y designación de los tres árbitros al estar contaminados) revise la actuación arbitral y de acuerdo con la valoración que hagan se decida por el órgano competente volver a disputar el encuentro Bélgica-España".

La selección española de rugby vio como la clasificación para el Mundial de Japón 2019 se le escapó de ente los dedos al perder el pasado domingo en Bruselas contra Bélgica por 18-10 con el arbitraje del rumano Vlad Iordachescu.

Con la derrota española, Rumanía es la que se clasifica directamente para el Mundial. Santiago Santos, seleccionador nacional, señaló al término del encuentro que había habido "un arbitraje tendencioso", y que no había sido "neutral".

Los jugadores de Santiago Santos terminaron tremendamente molestos con la actuación del colegiado del choque, quien tuvo que salir del césped protegido tras ser perseguido por algunos de los componentes del XV del León. Jaime Nava, capitán de la selección, pidió después perdón por ello.

A España le bastaba con vencer en terreno belga para sellar su clasificación, por segunda vez en su historia para una Copa del Mundo de rugby. Perdió y queda abocada a la repesca, primero ante Portugal y, si gana, tendrá que enfrentarse a Samoa.